Mental disorders are prevalent worldwide and their many associated impacts include adverse effects on education, employment, and the criminal justice system. Their annual global economic cost is huge and predicted to rise to 6 trillion US dollars by 2030. Both the prevalence and cost are expected to increase further following the COVID-19 pandemic. Public mental health is key to address these challenges, but there is a failure of implementation. What actions are needed to reverse this situation?
La salud mental es un desafío mundial
La prevalencia y los costes de los trastornos mentales probablemente aumentarán debido a la COVID-19
El Prof. Jonathan Campion, de Londres, Reino Unido, comentó que, antes de la COVID-19, las patologías mentales representaban al menos una quinta parte de la carga de morbilidad mundial, 1 y se ha considerado que esta cifra se ha subestimado en más de un tercio.2 Se estima que el coste económico global anual en el año 2030 será de 6 billones de USD.3
El Prof. Campion añadió que el efecto perjudicial de la pandemia de COVID-19 para la salud mental y los factores de riesgo de trastornos de salud mental aumentará aún más estas estimaciones de prevalencia y costes.
La salud mental pública es clave para abordar estos desafíos
Solo una minoría de personas con patologías mentales recibe tratamiento
La salud mental pública (SMP) utiliza un enfoque poblacional para reducir las patologías mentales de manera sostenida y mejorar el bienestar mental mediante intervenciones para:
- Tratar trastornos mentales
- Prevenir los efectos asociados a los trastornos mentales, por ejemplo, sobre la salud física, la educación, el empleo y el sistema de justicia
- Prevenir la aparición de patologías mentales
- Promover el bienestar mental4
El Prof. Campion afirmó que, a pesar de la existencia y la base de evidencia de las intervenciones del SMP, existen lagunas en la implementación de SMP.
Las lagunas en la implementación de la salud mental pública causan un sufrimiento que se puede prevenir a escala poblacional.
Solo una minoría de pacientes con patologías mentales reciben tratamiento, incluso en los países más desarrollados, y muchos menos reciben intervenciones para prevenir los efectos asociados. Además, las intervenciones de prevención de las patologías mentales o de promoción del bienestar mental son insignificantes.4
El resultado es un sufrimiento para las personas con enfermedades mentales y sus familias, que se puede prevenir a escala poblacional, la incapacidad de abordar y gestionar los efectos asociados y los altos costes asociados para diferentes sectores.
La COVID-19 ha ampliado aún más las lagunas en la implementación.1
Acciones para en abordaje de las lagunas en la implementación de la salud mental pública
La salud mental pública debería estar integrada en la respuesta a la COVID-19
El Prof. Campion afirmó que existe una necesidad urgente de abordar este fracaso de la implementación de la SMP, que contraviene el derecho a la salud,1 y destacó 12 acciones para mejorar la SMP:
- Evaluación de las necesidades
- Práctica de la SMP con evaluación de las necesidades, implementación de intervenciones basadas en la evidencia y evaluación de los resultados y los ahorros económicos: la SMP desempeñará un papel clave en la recuperación económica de la COVID-19
- Defensa coordinada y liderazgo de todas las partes implicadas para acordar un nivel aceptable de provisión y recursos con los psiquiatras, que desempeñan un papel fundamental para garantizar la implementación y el éxito de las intervenciones de SMP.
- Capacitación en SMP de una variedad de profesionales para aprovechar las oportunidades en línea
Los psiquiatras tienen un rol crucial para garantizar la implementación y el éxito de las intervenciones de salud mental pública
- Mejora de los conocimientos sobre salud mental de la población
- Enfoques basados en entornos, por ejemplo, escuelas, lugares de trabajo y prisiones
- Enfoques integrados con participación de diferentes organizaciones y sectores facilitados por la evaluación de las necesidades
- Tecnología digital para ofrecer intervenciones y formación a nivel global
- Maximización de los recursos existentes
- Intervenciones especiales, tales como el abordaje de las desigualdades socioeconómicas
- Empleo de la legislación existente y adopción de un enfoque de derechos
- Implementación de estudios sobre intervenciones basadas en la evidencia
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